Cómo aprovechar el coaching ejecutivo para mejorar la empresa
Según los expertos Perry Zeus y Suzanne Skiffington, el coaching ejecutivo tiene que ver con la relación que se establece entre el ejecutivo y el coach para lograr el propósito de conseguir un cambio constante en su comportamiento y transformar así su calidad de vida personal y profesional.
Por este motivo la intervención de un coach en cualquier ejecutivo de una empresa mejorará, sin lugar a dudas, la compañía. Y es que, gracias a recurrir a este tipo coaching, el ejecutivo fijará objetivos de mejora y establecerá un seguimiento periódico de los mismos.
Concretando un poco más, el coaching ejecutivo produciría dos efectos beneficiosos en la empresa.
En primer lugar, como el coaching provoca una reflexión interna en el ejecutivo sobre las conductas actuales de liderazgo ayuda a consensuar otras maneras de obtener resultados, abriendo nuevas posibilidades orientadas a la acción.
En segundo lugar, otra ventaja de recurrir a este proceso es la mejora en la eficiencia, desempeño y productividad de los colaboradores, debido a que el coaching ejecutivo promueve una nueva cultura en la que las empresas tiene confianza en la responsabilidad y el compromiso de sus empleados, que se esfuerzan por orientar su trabajo hacia la consecución de resultados.
Según los datos publicados por la empresa Manchester Inc. las compañías que ofrecían coaching a sus ejecutivos experimentaron mejoras en su productividad, calidad, servicio al cliente y más valor en las acciones de bolsa. Por otro lado, registraron menos reclamaciones de clientes y fueron capaces de retener y fidelizar a ejecutivos de talento y altas potencialidades que habían recibido coaching.
Además, la investigación concluye que aquellas empresas que han invertido en coaching para sus ejecutivos obtuvieron un ROI medio seis veces superior al coste del coaching, es decir, incrementaron un 600% su productividad.
Gracias a la intervención del coach, el ejecutivo aprende actitudes y herramientas clave para mejorar las relaciones personales, desarrollar nuevas habilidades de liderazgo y superar las barreras frente al cambio. Asimismo, a través de la sesiones de coaching, este está más capacitado para empatizar, escuchar, generar confianza y reforzar el compromiso con sus colaboradores.
Richard J. Leider, pionero del coaching ejecutivo
A pesar de que nunca un libro substituye la acción de un coach, merece la pena recomendar la lectura de las obras escritas de este autor. Más de diez libros, entre ellos tres best-sellers, sobre desarrollo personal y profesional.
Su especialidad es ayudar a las personas a encontrar el sentido a su vida personal y profesional.