TANV (Trastorno de aprendizaje no verbal)
El TANV (Trastorno de aprendizaje no verbal) es un trastorno de aprendizaje de base neurológica poco conocido y seguramente infradiagnosticado hasta la actualidad. Se estima que uno de cada 10 niños con trastornos de aprendizaje padecen TANV. También llamado síndrome del hemisferio derecho (HD). La historia es muy reciente y se remontan las primeras descripciones del trastorno al 1971. Otras denominaciones del TANV:
- Trastorno de la coordinación motriz (CIE10) (DSM-IV).
- Dispraxia del desarrollo
- Déficit de atención, del control motor y de la percepción (DAMP)
- Desarrollo cerebral atípico.
- TAP: TRASTORNO DE APRENDIZAJE PROCEDIMENTAL
En cuanto a la comorbilidad nos encontramos con que un 40% de las personas con TANV tienen problemas de lenguaje (TEL y dislexia). Un 20% de las personas diagnosticadas de TEL y dislexia también tienen dificultades visoespaciales. Hay que tener en cuenta la comorbilidad con otros trastornos y la línea tan delgada que los separa de los TEA de alto rendimiento (antes Síndrome de Asperger). Existe una discusión sobre si el TANV y los TEA de alto rendimiento son la misma entidad. No se ha llegado a un consenso. El TANV suele pasar desapercibido por los maestros. Se acostumbra a minimizar la importancia de los déficits no verbales y etiquetar a estos niños de "problemáticos", "mal educados" e "inmaduros". A menudo se les castiga y son objetos de burla por conducta y obsesiones que no pueden evitar. Las dificultades suelen pasar inadvertidas hasta que las demandas escolares desbordan las capacidades cognitivas. El TANV es considerado, pues, como un síndrome neurológico que comprende un abanico de déficits en los recursos personales para el aprendizaje. Estas carencias afectan no sólo a aprendizajes académicos sino mucho más en todos los aspectos de la vida individual. Afecta a la capacidad de percibir, expresar y entender las señales no verbales (no lingüísticas). En el TANV se aprecian dificultades vertebradas en tres ejes centrales:
- Dificultades en la comunicación no verbal
- Dificultades visoespaciales
- Dificultades motrices
Como consecuencia, estas dificultades desencadenan en:
- Problemas académicos
- Problemas sociales/de relación
- Problemas emocionales
Así pues, los chicos y chicas con TANV presentan dificultades en las siguientes áreas:
- Atención y percepción táctil y visual: El déficit en estas áreas puede llevar a la conclusión errónea de que los niños tienen TDAH.
- Coordinación psicomotriz: (torpeza): por ejemplo ponerse la bata o la chaqueta, saltar, lanzar una pelota, pedalear, recortar, escribir a mano, son actividades de coordinación psicomotriz que son todo un reto para los TANV.
- Adaptabilidad: estos niños tienen dificultades para adaptarse a los cambios en su rutina establecida. Encuentran confort y seguridad en la rutina y los cambios les provocan ansiedad.
- Orientación espacial y temporal: tienen una tendencia a perderse de camino de casa a la escuela. Ttambién se pierden y / o desorientan con facilidad. en los espacios no familiares.
- Flexibilidad mental: el niño TANV piensa y aprende de manera concreta y así procesa la información, en blanco y negro, sin matices de gris. Piensa en términos lógicos. Y pone etiquetas verbales a los conceptos que aprende, sin matices.
- Función ejecutiva y organización: Memoria de trabajo: el chico TANV tiene dificultad para priorizar y organizar tanto sus pensamientos como su trabajo.
Los niños TANV no pueden leer entre líneas, no interpretan ninguna otra comunicación que no sea verbal. Los chicos y chicas TANV no entienden las reglas sociales que gobiernan el comportamiento adecuado. Hay que trabajar estas habilidades sociales de manera planificada para que las aprendan https://youtu.be/trPNXjI3oYs CARACTERÍSTICAS DE LOS NIÑOS TANV Se trata de niños con una inteligencia normal, las capacidades verbales de los cuales (vocabulario, razonamiento verbal, ortografía, lectura ...) están preservadas e incluso pueden ser superiores a la media y por otro lado, presentan dificultades considerables en aspectos no verbales (orientación espacial, visiopercepción, coordinación ojo-mano, relaciones sociales) y en motricidad fina y gruesa. A nivel escolar, estos niños suelen tener mala letra, son muy lentos, no terminan las actividades ni exámenes en el tiempo previsto y como su nivel intelectual general está dentro de los límites normales, pasan generalmente como niños perezosos , vagos y distraídos. Dado que ya se le "etiqueta" normalmente no se investigan las causas de este comportamiento y por tanto, no reciben el tratamiento adecuado. SIGNOS DE ALERTA EN LAS PRIMERAS ETAPAS Puede ser difícil comprender la magnitud de su discapacidad y de qué manera tan significativa le afectará pocos años después. Dadas sus habilidades lingüísticas y su pasión por determinados temas nos puede hacer pensar que estamos delante de un niño de altas capacidades a pesar de observar sus dificultades motrices.
- Inicio del lenguaje precoz
- Inicio de la marcha lento
- Explora poco el entorno
- Dificultad para hacer dibujos
- Dificultad para recortar
- Dificultad para hacer servir el punzón
- Dificultad para hacer rompecabezas, puzzles o construcciones
- Dificultad para abrocharse la bata, ponerse la chaqueta, etc...
- Dificultad para coger los cubiertos
- Torpeza motriz. Son considerados patosos
- Dificultad para orientarse en nuevos espacios
- Miedos, fobias (está relacionado con la dificultad que tienen para adaptarse a nuevas situaciones o aprendizajes)
SIGNOS DE ALERTA EN ETAPAS POSTERIORES
- Continúan las dificultades relacionadas con la psicomotricidad fina: recortar, dibujar, abrocharse los zapatos, vestirse, lavarse los dientes, coger los cubiertos, ser pulido...
- Dificultad para aprender a columpiarse.
- Dificultad para tirarse por el tobogán.
- Dificultad para aprender a nadar.
- Dificultad para ir en bicicleta.
- Dificultades en el área d´EF.
- Dificultad para tocar cualquier instrumento musical.
- Dificultades para escribir de forma limpia, pulida y ordenada.
- Dificultad para organizarse en el folio. Con frecuencia se les hace repetir las tareas debido a su mala presentación.
- Dificultad para interpretar el reloj de agujas.
- Dificultad para orientarse en un mapa.
- Dificultades con el dibujo lineal.
- Dificultades para tocar la flauta.
- Pueden aprender cualquier cosa. La palabra operativa es enseñar.
- Los niños TANV no aprenden de la observación, asimilando información a lo largo del camino. Se les debe enseñar explícitamente, de manera verbal, paso a paso.
- No aprenden mirando. No aprenden con la observación. Necesitan información específica cuando se les da una instrucción.
- Evitar la caligrafía con el propósito de que mejore su letra.
- Evitar realizar tareas de copia, sobre todo de la pizarra. Se le puede ayudar facilitándole el material ya preparado para copiarlo desde su mesa.
- Utilizar hojas cuadriculadas o con pauta.
- Las tareas manuales requieren ayuda o modificaciones.
- Tienen muchas dificultades con los mapas y esquemas, por ello es necesario ayudarles en estas tareas.
- Facilitarles más tiempo en las tareas escritas. Favorecer el uso del ordenador.
- El niño TANV es típicamente unimodal, o sea que no procesa la información de más de una modalidad a la vez (por ejemplo instrucciones verbales y una demostración simultánea)
- Hacer uso de las nuevas tecnologías para favorecer su rendimiento académico: procesadores de texto que permitan mejorar sus presentaciones, calculadoras, etc..
- Entender su necesidad de formular muchas preguntas.
- Evitar los dobles sentidos durante las explicaciones en el aula.
- Proporcionarle un entorno fácil de preveer.
- Evitar exponerlo a ruido excesivo.
- Debemos trabajar su posición dentro del grupo: evitar etiquetarlo con adjetivos negativos como lento, patoso, etc…al contrario valorarle sus cualidades positivas, especialmente sus cualidades verbales y los conocimientos que suelen tener.
- Encargarles alguna responsabilidad dentro del aula para que se sientan útiles.
- Proporcionarle un referente que le de seguridad, buscar algún compañero que le pueda ayudar.
- Es muy importante que se les proteja y se les supervise de manera privilegiada por el riesgo de ser el centro de burlas, insultos y otros comportamientos negativos. Pueden ser objeto de acoso escolar, sobre todo en la etapa de Secundaria.
- Debemos favorecer su integración y participación en actividades de recreo y juego: evitar, por ejemplo, que siempre sean los últimos elegidos para jugar, que siempre jueguen en la posición que nadie quiere (de portero, por ejemplo), etc.
- Enseñar a toda la clase habilidades de relación con otros chicos y la importancia del respeto a los demás.
- Valorar todos sus logros por pequeños que resulten
- Ponerlo en contacto con otros niños: llevarlo al parque, que participe en actividades extraescolares, en los cumpleaños ...
- Evitar que se aísle de la relación con otros niños.
- Ayudarle a interpretar las claves de la relación social: gestos, ironías, bromas ... Enseñarle algunos trucos para hacer amigos, para participar en un juego, para defenderse de burlas, para defender sus posesiones
- Ayudarle a interpretar adecuadamente el comportamiento de los demás: no siempre se están burlando de él, ni haciéndole daño. Para ello es necesario analizar estas situaciones.
- En ocasiones, se pueden entrenar ciertas habilidades motrices con él para ponerlas en práctica con otros niños: controlar el balón con el pie, correr, saltar, etc..
Resulta imprescindible trabajar las habilidades sociales junto con un especialista tanto a nivel individual como de grupo. Vídeos relacionados: https://youtu.be/zn3jLevpA48 https://youtu.be/1bhzX5uTw2Q https://youtu.be/l9ggHYHlvXE Lidia Arroyo Navajas Profesora de la Maestría Universitario en Necesidades Educativas Especiales y Atención Temprana de la VIU