Las diversas formas de bullying: físico, psicológico, verbal, sexual, social y ciberbullying
En este artículo, presentamos las diferentes formas de acoso escolar o bullying que existen: bullying físico, psicológico, verbal, sexual, social y ciberbullying. Para conocer los efectos del bullying en la víctima y el agresor, te recomendamos leer "Bullying: consecuencias en la víctima y el agresor". El acoso escolar es un problema común en las escuelas de todo el mundo. A veces es difícil de detectar debido a que ocurre lejos de la presencia de los adultos y porque puede tomar diferentes formas, incluyendo el ciberbullying que utiliza las nuevas tecnologías para amplificar la humillación a la víctima y preservar el anonimato de los agresores. En la actualidad, se han identificado 6 tipos de bullying, y en muchos casos, la víctima puede ser víctima de múltiples formas de acoso durante meses, un año escolar o incluso varios años. Si quieres saber qué tipos de bullying existen, cuáles son los factores de riesgo y cómo detectarlo y prevenirlo, te recomendamos la guía "Bullying en el aula".
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Bullying físico
Este es el tipo de acoso más común, especialmente entre niños. Incluye golpes, empujones e incluso palizas por parte de uno o varios agresores contra una sola víctima. A veces, también incluye el robo o daño intencional de las pertenencias de la víctima.
Bullying psicológico
En este caso, existe una persecución, intimidación, tiranía, chantaje, manipulación y amenazas contra la otra persona. Estas acciones dañan la autoestima de la víctima y fomentan su sensación de miedo, y son las más difíciles de detectar por parte de profesores o padres porque son formas de acoso o exclusión que se llevan a cabo en secreto. Con frecuencia, los agresores utilizan este tipo de acoso para subrayar, reforzar o resaltar acciones previas, manteniendo así la amenaza latente. Esto aumenta la fuerza del maltrato, ya que el acosador muestra un mayor poder al amenazar incluso cuando hay una figura de autoridad presente. En la víctima, aumenta el sentimiento de indefensión y vulnerabilidad, ya que percibe esta audacia como una amenaza que eventualmente se materializará de manera más contundente. Puede consistir, por ejemplo, en una mirada, una señal obscena, una cara desagradable o un gesto.
Bullying verbal
Son acciones verbales con la finalidad de discriminar, difundir chismes o rumores, realizar acciones de exclusión o bromas insultantes y repetidas como poner apodos, insultar, amenazar, burlarse, reírse de otros, generar rumores de carácter racista o sexual, etc. Es más común entre algunas niñas durante la adolescencia.
Bullying sexual
Se presenta un acoso, inducción o abuso sexual o referencias malintencionadas a partes íntimas del cuerpo de la víctima. Incluye el bullying homófobo, que es cuando el maltrato hace referencia a la orientación sexual de la víctima debido a una homosexualidad real o imaginaria.
Bullying social
Este tipo de bullying busca aislar a un niño o joven del grupo, ignorándolo, excluyéndolo y marginándolo. Puede ser directo: excluir a la víctima de actividades, sacarlo del grupo, o indirecto: ignorarlo, tratarlo como un objeto o hacer que parezca que no existe.
Ciber-bullying o acoso cibernético
Con el aumento de las tecnologías, este tipo de bullying se está volviendo más frecuente. Es un tipo de acoso muy serio y preocupante debido a la gran visibilidad y alcance que pueden tener los actos de humillación contra la víctima, así como el anonimato en el que pueden permanecer los acosadores. Los canales son muy variados: mensajes de texto en móviles, tabletas y computadoras, páginas web y blogs, juegos en línea, correos electrónicos, chats, encuestas en línea de mal gusto, redes sociales, suplantación de identidad para publicar mensajes, etc. El contenido del acoso puede incluir insultos, montajes fotográficos o de video de mal gusto, imágenes inadecuadas de la víctima tomadas sin su permiso, críticas respecto a su origen, religión, nivel socioeconómico o de sus familiares y amigos, etc. Todo con el objetivo de humillarla. Independientemente del tipo de bullying, el perfil del acosador suele ser de una persona físicamente fuerte, impulsiva, dominante, con conductas antisociales y sin empatía hacia sus víctimas.