Síndrome de Balint: qué es, tratamientos y más
El síndrome de Balint es una afección de gran interés investigativo en el estudio de los trastornos neurológicos. Gracias a esto, los medios científicos y médicos para conocer más sobre su comportamiento han evolucionado a lo largo de los años. A continuación, conoceremos a fondo esta condición poco frecuente y todo lo que conlleva a nivel orgánico.
¿Qué es el síndrome de Balint?
Se trata de una condición que afecta específicamente al área ocular y genera alteraciones en la capacidad de percepción visual. Se origina en la zona parietooccipital del cerebro, donde las señales nerviosas de los ojos transmiten la información recibida a través de canales neuronales. Esta enfermedad fue descrita por primera vez en el año 1909 por el neurólogo húngaro Rudolph Bálint.
Su denominación en el campo clínico es "ataxia óptica", una descripción precisa sobre las modificaciones que provoca en las habilidades de percepción visual del paciente. Este síndrome suele presentarse en personas de entre 50 y 60 años, y muy rara vez puede aparecer en individuos jóvenes.
El campo de investigación acerca de esta patología a nivel mundial es un área de mucho interés en diferentes especialidades relacionadas con la salud neuronal y cerebral. Esto se debe a que los trastornos que ocasiona en el organismo pueden llegar a transformarse en condiciones de índole psicológica.
Cabe mencionar que, en el Perú, la salud neuronal se ha convertido en un punto de soporte importante para conocer qué es el síndrome de Balint. Por ello, este suele ser un tema de investigación y divulgación frecuente en la actualidad, ya que su impacto en la salud general es bastante significativo.
Características
En primer lugar, es necesario que puntualicemos sus principales características, entre las cuales se encuentran las siguientes:
- Apraxia: Este concepto define la dificultad que tiene la persona afectada para generar una coordinación visual estable al mirar objetos que están presentes en un determinado espacio. Además, se identifica como la incapacidad para observar diferentes elementos de manera frecuente en un campo de visión amplio.
- Ataxia óptica: Se trata de una alteración que perjudica especialmente la habilidad que posee un individuo para manipular con las manos lo que ve con los ojos. Dicha condición surge debido a que no se consigue una percepción tridimensional apropiada del entorno en el que se halla el paciente.
- Simultagnosia: Este rasgo es típico de esta dolencia. La presente característica consiste en la incapacidad que tiene el enfermo para visualizar dos objetos al mismo tiempo. Cuando trata de llevar a cabo dicha tarea, uno de los ojos se enfoca en un solo artículo, mientras que el otro desaparece del campo visual.
- Agnosias: Las agnosias también surgen frecuentemente en el síndrome de Balint e implican un estado de inhabilitación de la percepción. Es decir, el afectado no puede reconocer lo que ve, sin importar si dicho elemento se encuentra lejos o cerca.
Causas
Esta patología puede aparecer a lo largo del tiempo o a corto plazo y los motivos de su surgimiento son diversos. No obstante, de manera general, siempre que ocurra una lesión en la unión parietooccipital, hay muchas probabilidades de que la afección se manifieste y cree síntomas después de ciertos periodos.
Una de las síndrome de Balint causas más frecuentes es la existencia de enfermedades cerebrovasculares en cualquiera de sus variantes. En este caso, la lesión posee un sustrato anatómico en la región alojada entre dos arterias de suma relevancia: la cerebral media y la posterior, las cuales son imprescindibles para la supervivencia total del cerebro. Por supuesto, otros de los motivos más comunes de su aparición son los eventos cardiovasculares, ya sea una embolia, una vasculitis o un trombo.
Todo ello se debe a que, al sufrir cualquiera de estas dolencias, se produce un daño significativo en los niveles de irrigación cerebral. Alteraciones de este estilo conllevan lesiones cerebrales que, en la mayoría de las ocasiones, evolucionan a una muerte neuronal irreversible por la falta de oxígeno. Enfermedades como el Alzheimer tienden a perjudicar la región parietooccipital a largo plazo, así como las heridas por armas de fuego.
1.3 Síntomas
Como mencionábamos anteriormente, los síndrome de Balint síntomas afectan exclusivamente a la capacidad de percepción visual de una persona. Entre algunas de las alteraciones corporales más destacables que pueden llevar a la detección de esta condición, tenemos las siguientes:
- Sensación de confusión al intentar manipular un objeto con las manos: El afectado presenta una dificultad considerable para llevar a cabo esta tarea.
- El paciente sufre de apraxia oculomotora: Se trata de la incapacidad para modificar el foco de atención de un punto en el espacio hacia otro.
- Disminución del control voluntario sobre la actividad ocular: Lo que ocasiona múltiples problemas y malestares a corto y largo plazo para el enfermo.
- Tendencia a prestar atención a un objeto: A ello, se suman los impedimentos para mover la mirada, incluso cuando se reciben estímulos visuales desde otras regiones del campo óptico.
- Incapacidad para observar dos puntos a la vez: Sin que alguno de ellos desaparezca del campo de visión panorámico.
- Dificultad para captar estímulos visuales complejos: Dado que la persona no puede identificarlos de manera correcta.
- Alto grado de desorientación en espacios grandes: Confusión y aturdimiento.
- Padecer de prosopagnosia: Consiste en la ausencia de la habilidad para reconocer caras.
Tratamiento
El sindrome de Balint tratamiento depende de ciertos factores, la recuperación de la actividad neuronal normal es uno de ellos. Ello implica que, mientras no haya una muerte neuronal irreversible, la enfermedad puede ser tratada a largo plazo, aunque nunca curado por completo. Para lograrlo, es crucial la aplicación de procesos de rehabilitación continua a nivel motor y cerebral, y hay que poner el principal foco en la estimulación visual.
Junto a este, otro de los métodos comúnmente empleados es la aplicación de terapia ocupacional, bien sea mediante medios tradicionales o utilizando tecnología moderna. Este procedimiento tiene que compaginarse con tratamiento psicológico para reducir la sensación de confusión que sufre el paciente, la cual puede desembocar en depresión o psicosis.
La potenciación de las habilidades psicomotoras normales consiste en hacer que el afectado lleve a cabo actividades de estimulación visual básicas. En este caso, puede ser observar un objeto en movimiento a baja velocidad o hacer dibujos simples. De este modo, la reactivación de los canales neuronales es constante y no requiere de una intervención invasiva. Ello ocasiona una recuperación tardía, pero efectiva.
¿Cómo ayuda la neuropsicología clínica en estos casos?
En término generales, la neuropsicología brinda herramientas de diagnóstico funcional para afecciones con una naturaleza similar a la de este síndrome. El principal motivo es que la alteración nerviosa y ocular a largo plazo provoca un impacto muy grande en la calidad de vida de quienes sufren esta enfermedad. Por ello, aplicar las terapias correctas implica un conocimiento especializado acerca de cómo tratar sintomatologías como esta.
En consecuencia, estudiar una maestría en Neuropsicología Clínica resulta sumamente beneficioso para conocer el modus operandi de esta patología a través de su observación o de otras con las que comparta un cuadro clínico. El Instituto Peruano de Neurociencias es uno de los organismos más preparados en cuanto al avance de mecanismos de análisis de este y otros síndromes.
Junto a ello, cabe mencionar que el sector salud, en el año 2022, ha recibido una inversión de S/ 22,000 millones. Gastos de esta magnitud suponen un progreso importante en la creación de nuevos métodos de rehabilitación cerebral y neuronal.
¿Dónde y cómo aprender más sobre la salud neuronal?
Una carrera universitaria en Psicología es un buen primer paso para cualquier estudiante que desea conocer más sobre la salud cerebral en general. Las maestrías de salud en todo el Perú son de un alto valor dentro del campo científico y médico gracias a la implementación de prácticas modernas con herramientas virtuales. Tener acceso a este tipo de educación es bastante sencillo en la actualidad debido a la alta demanda del sector sanitario.
En este sentido, la formación a distancia se ha convertido en un recurso muy utilizado por estudiantes de Medicina que desean estudiar un pregrado o un posgrado.
La llegada de tecnologías de telecomunicación como el 5G, por ejemplo, ha supuesto un gran avance en este aspecto. No solo porque mejora la experiencia en cuanto a conectividad, sino también porque permite mantener una comunicación constante en aulas virtuales.
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