20 de marzo – día internacional de la francofonía
El próximo 20 de marzo se celebra en los cinco continentes el Día Internacional de la Francofonía. El mundo entero confluirá en un espacio lingüístico compartido: la universalidad de la lengua francesa.
Y no es para menos, pues actualmente la lengua de Molière cuenta con 212 millones de hablantes y se esperan muchos más millones a lo largo de este siglo en el que nos encontramos.
Grado de Traducción e Interpretación
Francofonía: qué es y cuál es su historia
Quizás deberíamos empezar por definir Francofonía, qué entendemos por este término y cuáles son sus usos. Pudiera parecer un vocablo moderno, pero, a decir verdad, hay que remontarse al siglo XIX y a otra disciplina: el geógrafo francés Onésime Reclus (1837-1916) fue el primero en utilizarlo para designar los espacios geográficos en los que se hablaba francés.
Algunas décadas más tarde, ya en los años sesenta del siglo XX, adquiere su sentido más usual cuando algunos países africanos acceden a la independencia. Hombres y mujeres de letras están en el origen de este movimiento francófono.
En los escombros del colonialismo hemos encontrado este instrumento maravilloso, gustaba de repetir el poeta Léopold Sédar Senghor, antiguo presidente de Senegal: La Francofonía es un humanismo íntegro que se teje alrededor de la tierra: la simbiosis de “energías dormidas” de todos los continentes, de todas las razas, que se despiertan a su calor complementario.
La francofonía es una cultura, que, más allá de la lengua, se concibe como el medio de hacer participar a los pueblos que forman parte de ella en la civilización de lo universal, la única capaz de detentar un determinado número de valores.
La francofonía en la actualidad
Hoy la Francofonía también se manifiesta en las citas culturales y deportivas, las fiestas populares organizadas en los cinco continentes: como la Jornada Internacional de la Francofonía, que celebraremos en unos días, mucho más allá del mundo francófono, la universalidad de la lengua francesa; como el Festival de Cine de Namur, que atrae a un extenso público así como a profesionales del norte y del sur; como el Festival Internacional de las Francofonías en el Limousin, que contribuye a hacer descubrir, sobre todo al público francés, el teatro y los artistas de diversos puntos del espacio francófono; como las Francofolías, que se han convertido en la cita anual insustituible de la canción de expresión francesa; como los Juegos de la Francofonía, organizados cada cuatro años y que asocian el deporte y la cultura y suponen una verdadera fiesta de la juventud, porvenir de la francofonía. Seguramente la suerte de la lengua francesa y de la francofonía se sitúa en África.
A día de hoy, como anunciaba unas líneas más arriba, hay 212 millones de francófonos. Pero si se hace una proyección de futuro, a condición de que los progresos de escolarización en francés continúen en el mundo, el número de francófonos en 2060 alcanzará la cifra de 767 millones, de los cuales el 90% vivirán y hablarán en el continente africano. Y, sin embargo, la francofonía no es solamente el uso de la lengua sino un conjunto de valores democráticos, vivos que comparte toda una comunidad. Una comunidad que en nuestros días debe vivir en un contexto de multilingüismo, Suiza y Canadá son un buen ejemplo de ello.
Francia como "imagen de marca"
Francia dedica más de 600 millones de euros cada año a la promoción del francés en el mundo. Para el Hexágono la promoción del francés forma parte de una política más global a favor del pluralismo lingüístico. Esta política inspira sus obligaciones a la Organización de Naciones Unidas para la educación, la ciencia y la cultura (UNESCO) y en las instituciones europeas, así como sus acciones de cooperación internacional.
De este modo el francés se aprovecha de la “imagen de marca” de Francia, de su papel en Europa y en la escena internacional, de su dinamismo de 5ª potencia industrial del mundo, de su influencia cultural, que la hace el territorio más visitado del mundo, el tercer país de acogida de estudiantes extranjeros, el país cuyos libros y películas son los que más se difunden después de los países de lengua inglesa.