Pedagogía musical: el método Kodaly
El método Kodaly supuso una alternativa lúdica y divertida para la enseñanza de la música en la escuela en edades tempranas. Lo desarrolló Zoltan Kodaly en Hungría en la primera mitad del siglo XX. En 2016, la Unesco lo incluyó en el registro de buenas prácticas que salvaguardar. La razón que esgrimió es que permitía a los alumnos de todas las edades conocer la música folclórica de su entorno e interpretarla. Si deseas hacer un grado en Educación Infantil o estás interesado en especializarte en logopedia, es fundamental que sepas qué es el método Kodaly.
¿Qué es el método Kodaly?
Más que un método es un sistema pedagógico para la enseñanza musical. Con él, Kodaly trataba de soslayar las dificultades técnicas que experimentaban los niños cuando entraban en contacto con un instrumento musical. Estableció varios niveles de dificultad, dependiendo de la edad de los alumnos.
Por otro lado, les proporcionó un lugar relevante a las canciones tradicionales pertenecientes al folclore propio de la lengua materna. De esta forma, además de música, los más pequeños aprendían también su idioma. Escogió este tipo de canciones por ser, generalmente, fáciles de ejecutar.
Kodaly organizó las actividades en forma de secuencias. De este modo, podía adaptarse al nivel de cada alumno y a sus edades. Sus tres herramientas metodológicas básicas son:
- Las sílabas de solfeo rítmico. Parte de la consideración de la negra como la unidad de pulso y se le atribuye la sílaba ta. A partir de ella, a las corcheas, se les asigna las sílabas ti-ti. Sin embargo, no se tiene en cuenta el hecho de los tiempos de cada corchea sean la mitad de la negra.
- Sistema de solfeo relativo o do móvil. Consiste en que cada alumno adopta el tono que le resulta cómodo y las notas aparecen representadas en una sola línea. Esa línea representa el pentagrama tradicional. Debajo de cada figura aparece el nombre de la nota o su inicial. Por eso, en algunas escuelas la nota si pasa a ser ti para que no sea coincidente con la inicial de sol.
- Los signos manuales. No los diseñó Kodaly sino John Curwen a finales del siglo XIX. Representan las notas y sus relaciones entre ellas. Así, por ejemplo, do se representa con un puño cerrado y re con el índice extendido como si señaláramos algo. La intensidad del tono se manifiesta colocando la mano a diferente altura.
Fundamentos de Kodaly
Este método incluye varias novedades:
- La base principal es el canto. A través de las canciones populares, siempre en la lengua materna del niño, se accede al ritmo y a los esquemas melódicos. Posteriormente, se amplía la base musical incorporando otros ritmos y otros conceptos musicales presentes en otras culturas. Lo interesante del método es que solo se utiliza la voz cantada como si fuera un instrumento musical.
- Sistema pentatónico. Se trata de un sistema muy sencillo de cinco notas sin semitonos. La relevancia que posee es que se encuentra en la base de la música tradicional de muchos pueblos. Su ausencia de complejidad permite al alumno aprender los conceptos básicos sin enfrentarse a las dificultades técnicas de aprender a tocar un instrumento.
- Proceso de solmización. Se trata de un sistema de lectura musical en el que se toma la nota tónica y se la llama do, aunque la nota real representada no sea esa. A partir de ese do, se reproducen ordenadamente las demás. La solmización enseña las notas a través de los sonidos, sin prestar atención a su nombre.
- El recurso de la fonomimia. Es uno de los más característicos de este sistema. Indica los sonidos de la escala con una determinada posición de las manos y la altura en la que se realiza. De esta forma, los alumnos interiorizan los intervalos y se estimula el desarrollo del canto interior. Es muy útil, por ejemplo, en la fase de oralización en niños sordos.
- La polifonía. Ayuda a desarrollar la audición interior y favorece la afinación adecuada. De esta manera, se produce el desarrollo del oído musical. La pauta comienza con un canto simple a dos voces, al que se incorpora poco a poco una tercera voz, una cuarta y, así, sucesivamente. Se avanza de una forma más natural hacia la diversidad rítmica y la estructura coral.
- Los fonemas rítmicos. Al principio, los alumnos verbalizan algunos ritmos y los reproducen con percusiones sencillas, como las palmadas. De este modo, los va interiorizando.
- La memoria musical. Se estimula mediante la repetición de ritmos y de melodías. Al desarrollar tanto la audición interna como el oído, se favorece la memoria musical.
- La audición interior. Permite el canto interior según aparece en la partitura. Así, se interpreta correctamente tanto mediante la voz como con un instrumento.
Ventajas del método Kodaly
Las ventajas del método Kodaly son multifactoriales. Está demostrado que favorece el desarrollo y madurez de determinadas capacidades cognitivas. Entre otras cosas, afecta positivamente al proceso de aprendizaje de la comprensión lectora y de la escritura. De esta forma, estimula el desarrollo del lenguaje tanto en su expresión oral como escrita.
La interacción entre los alumnos que implementa potencia sus habilidades sociales. También el ritmo estimula la expresividad corporal. Por último, desarrolla el oído musical y las capacidades sensitivas de los niños.
Actividades para el método Kodaly
Para aplicar el método Kodaly las actividades que se suelen proponer son muy variadas, en función del aspecto que se desee trabajar.
Estudiar el ritmo de una canción
Para esto se puede realizar la siguiente secuencia de actividades:
- Señalar el ritmo con los pasos mientras se camina.
- Indicarlo con la voz mediante el uso de sílabas rítmicas.
- Interpretar con palmadas la secuencia rítmica.
- Utilizar un instrumento de percusión.
- Percutir con las manos mientras se incita a pensar mentalmente en la letra de la canción.
Interiorizar ritmos
La secuencia, en esta ocasión, puede ser la siguiente:
- En primer lugar, cantar la canción con su letra.
- Posteriormente, cantarla solo con sílabas rítmicas.
- A continuación, representar el ritmo con los palos magnéticos en la pizarra.
- Por último, se realiza la lectura rítmica del patrón de la pizarra.
Desarrollo del oído interno e interiorización del ritmo
Para esta actividad, se utiliza el juego del teléfono. Se colocan unos cuantos niños en fila. El último transmite un esquema rítmico en el hombro del compañero que tiene delante. Este lo repite, a su vez, en el compañero que tiene delante y así sucesivamente hasta llegar al primero. Cuando lo recibe el primero, lo interpreta mediante palmadas. El resto de la clase comprobará si la emisión se hizo correctamente y, si no es así, comentará dónde estuvo el fallo.
Improvisación de ritmos
El primer niño inventa un ritmo de dos compases. El segundo compañero repite ese ritmo y le añade otros dos compases inventados por él. El tercer niño ejecuta los cuatro ritmos inventados por los primeros alumnos y le suma otros dos, y así, sucesivamente.
Fononimia
Es una forma de canto en la que se utilizan determinados signos elaborados con las manos para representar las notas. Para realizar la actividad son necesarias cartulinas, tijeras y pegamento. Con ellos se hacen unas cartas que muestren los signos manuales, por un lado, y las notas, por otro. El profesor repartirá una carta a cada alumno y ellos deberán emparejarse para que se corresponda la carta del signo con su nota correspondiente. Este juego se repite varias veces con el fin de que los niños aprendan dicha relación.
Solfeo silábico
La finalidad de las actividades sobre solfeo silábico es que los alumnos practiquen los ritmos y que identifiquen la duración temporal de cada figura musical. La actividad consta de los siguientes pasos:
- Se les proporciona a los niños una explicación sobre cómo funciona el solfeo silábico con sus diferentes sílabas rítmicas y tiempos.
- Posteriormente, se procede a escuchar la canción que se haya elegido para la actividad.
- Todos los alumnos cantan la canción, fijándose especialmente en la duración de cada nota.
- A continuación y ayudados por la partitura, practican todos el ritmo de la canción usando el solfeo silábico.
- Para finalizar, se incorpora la fononimia en la interpretación de la canción por parte de los alumnos.
Son muchas las actividades del método Kodaly que se pueden llevar a cabo. No solo son creativas, sino que permiten a los niños interaccionar entre ellos. De esta forma, se divierten y trabajan sus habilidades sociales.
Enseñar música no tiene por qué ser tedioso ni para los profesores ni para los alumnos. Para su aprendizaje, pueden utilizarse métodos intuitivos, como el sistema Kodaly. Se enseñan en nuestro grado de musicología o en elmáster de investigación musical.
El método Kodaly sigue siendo una forma revolucionaria de introducir a los más pequeños en el aprendizaje musical. Además, estimula otras áreas del conocimiento, como su capacidad lectora, el lenguaje y les ayuda con la escritura. Por otro lado, estas habilidades se pueden ordenar por niveles según la edad y la madurez de los alumnos. El uso de las canciones tradicionales rescata ese patrimonio cultural de cada pueblo, un valor reconocido por la Unesco. Consulta ahora las opciones de formación que te ofrecemos en relación con la musicología.