¿Qué se entiende por modelo de negocio?
En el mundo empresarial, el término modelo de negocio se utiliza con frecuencia, aunque a menudo se malinterpreta o se sobreentiende su significado. Es la base sobre la cual se construye una empresa exitosa, siendo el plan que guía las operaciones diarias y las decisiones estratégicas a largo plazo.
En esta era digital, los modelos de negocios digitales han cobrado relevancia, transformando la manera en que las empresas operan y generan valor para sus clientes.
Ahora bien, ¿qué entendemos exactamente cuando hablamos de ello? ¿Qué tipos existen y cómo influyen en el devenir de las organizaciones que los implementan? Sin duda, se trata de una información valiosa que aporta un plus a tus conocimientos sobre dirección y gestión empresarial. Por ello, nuestros expertos han desarrollado este contenido, que puede ser un buen complemento al formarse en administración y dirección de empresa.
¿Qué es un modelo de negocio?
En términos generales, es el plan estructurado que una organización sigue para generar ingresos y beneficios. Incluye:
- Identificación de los productos o servicios que la entidad planea vender.
- Estrategias de marketing y ventas que se implementarán.
- De qué forma la organización planea interactuar con sus clientes.
En consecuencia, es una representación integral de cómo funciona una empresa.
Debemos tener en cuenta que el modelo de negocio no solo define lo que una empresa ofrece al mercado, también cómo crea y entrega valor a sus clientes. Además, incluye aspectos como las fuentes de ingresos, los costes operativos, la propuesta de valor única y la estructura organizativa. De esta manera, el modelo de negocio proporciona una visión completa del funcionamiento interno y externo de una empresa.
Ventajas e inconvenientes
Concebir, diseñar e implementar un modelo de negocio es muy necesario para avanzar en la dirección correcta hacia los objetivos de la empresa. El Ministerio de Economía, Comercio y Empresa respalda la idoneidad de contar con estas líneas maestras de actuación bien definidas.
Entre las ventajas que implica seguir un modelo de negocio, destacan las siguientes:
- Precisión estratégica y visión clara de las fortalezas de la empresa.
- Enfoque orientado al cliente, ya que se identifican y se resuelven sus necesidades con más eficacia.
- Disminución de los costes e incremento de la eficiencia.
- Mejora en la competitividad y la relevancia a largo plazo, pues favorece la capacidad de adaptación y adecuación a las nuevas circunstancias.
En cuanto a las debilidades e inconvenientes que puede generar su incorporación encontramos:
- Rigidez y menor flexibilidad ante las necesidades de adaptación al cambio.
- Freno a la innovación y la incorporación de novedades.
- Potencial vulnerabilidad ante la competencia, en especial cuando tu modelo de negocio es fácil de imitar.
- Menor diferenciación, porque a menudo los modelos se repiten y restan originalidad.
Tipos de modelo de negocio
Si estás dirigiendo una empresa o preparándote para hacerlo, es crucial decidir qué modelo aplicas, ya que suele marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso.
Cuando estableces qué estrategia utiliza tu organización para generar ingresos y beneficios, lo determinas todo. Estamos hablando de un plan detallado que describe cómo una empresa crea, entrega y capta valor. En buena lógica, existen diversos tipos de modelos de negocio, cada uno con sus propias características y ventajas.
Los modelos de negocio se clasifican en distintos tipos:
- Modelo de negocio tradicional. Se basa en la venta directa de productos o servicios a los consumidores. Es habitual en negocios minoristas y restaurantes. Sin embargo, con el auge de la tecnología y la digitalización han surgido nuevas alternativas que, a través de internet, permiten llegar a un público más amplio y ofrecer servicios innovadores.
- Modelos de negocios digitales. Están en auge y se refieren a aquellos planes estratégicos que aprovechan las tecnologías digitales para mejorar o transformar las operaciones comerciales tradicionales. Los vas a encontrar tanto en empresas puramente digitales como en otras tradicionales que incorporan elementos digitales en su operativa.
Dentro de la amplia variedad de modelos de negocios digitales existentes, se incluyen las suscripciones online y la venta directa a través del comercio electrónico. Con independencia de su naturaleza, todos ellos comparten el objetivo común de utilizar la tecnología para mejorar la eficiencia, expandir el alcance del mercado y aumentar la rentabilidad.
En definitiva, los modelos de negocios digitales son un componente esencial en el mundo empresarial actual y representan nuevas oportunidades para innovar y crecer.
Entre ellos encontramos el modelo freemium, muy popular en empresas de software y aplicaciones móviles. Este modelo ofrece una versión básica del producto o servicio gratuitamente, mientras que las funciones avanzadas o premium tienen un coste adicional.
También destaca el modelo de suscripción, utilizado por empresas como Netflix o Spotify. Los usuarios pagan una cuota mensual para acceder a un catálogo ilimitado de contenido. También existe el modelo marketplace, donde una plataforma digital conecta a compradores y vendedores a cambio de una comisión por cada transacción realizada.
Ten en cuenta que no existe un modelo superior a otro. Cada empresa debe analizar su contexto, sus objetivos y los recursos disponibles para elegir el modelo más adecuado. Así, las universidades como VIU desempeñamos un papel fundamental al proporcionar formación actualizada sobre los diferentes tipos de modelos de negocio existentes. Con la preparación adecuada, las y los estudiantes adquieren los conocimientos necesarios para tomar decisiones informadas al respecto en su futuro profesional.
Otros modelos de negocio aplicables
Las opciones planteadas, se completan con otras posibilidades que también pueden aportar mucho valor al porvenir de tu empresa. El análisis de la situación y de las propias fortalezas determinará su mayor o menor adecuación:
- De publicidad. Consiste en generar ingresos a partir de la exhibición de anuncios dirigidos al público general o segmentado. Se ofertan productos o servicios gratis, para generar tráfico y que los anunciantes acudan. Google obtiene una gran fuente de su riqueza de este modo.
- De franquicia. Otorgar licencias de marca y sistemas de negocio a los interesados es el modus operandi en este enfoque. Los interesados explotan esos mismos negocios a cambio de una tarifa inicial y de constantes regalías. McDonald’s sirve como referente muy claro.
- De afiliados. Estos protagonistas se encargan de promocionar servicios o productos ajenos a cambio de comisiones. Amazon es un estupendo ejemplo.
- De producción en masa. La clave radica en generar artículos estandarizados en grandes cantidades para generar economías de escala y ofrecer precios más bajos.
- De licencia de software. Se otorgan licencias para el uso de los artículos a cambio de determinadas tarifas, igual que hace Microsoft.
- De fabricación por encargo. La personalización es la quintaesencia de este planteamiento. Nike, por ejemplo, tiene una opción de personalizar las zapatillas y las fabrica en base a las solicitudes individualizadas recibidas.
- De servicios profesionales. Se da en entornos de asesoramiento y especialización.
- De blockchain y criptomonedas. Se apoya en la realización de transacciones fiables y descentralizadas.
- De fabricación B2B. Los productos se venden directamente a otras empresas que los incorporan en la elaboración de los suyos. Es decir, el cliente final no es el público objetivo.
Características clave de un modelo de negocio
Un modelo de negocio es una representación integral de cómo una organización genera, entrega y captura valor. Es el esquema que define la manera en que una entidad económica se conecta con sus clientes, proporciona sus productos o servicios y obtiene beneficios. Por lo tanto, influyen en el éxito y la sostenibilidad de cualquier empresa, tanto si es tradicional como digital.
Las características clave de un modelo de negocio se incluyen en la propuesta de valor, que describe:
- Los productos o servicios que ofrece la empresa.
- El segmento de mercado al que se dirige.
- Los canales a través de los cuales se entregan estos productos o servicios.
- Las relaciones con los clientes.
- Las fuentes de ingresos.
- La estructura de costes.
Estos componentes deben estar interrelacionados, perfectamente alineados, para garantizar el funcionamiento eficiente del modelo.
Los modelos de negocios digitales, por su parte, han ganado relevancia en la era actual debido al auge de estas tecnologías. Todos ellos se caracterizan por su capacidad para aprovechar la digitalización para mejorar procesos, reducir costes y aumentar el alcance. Al igual que los modelos tradicionales, también deben tener en cuenta las características mencionadas anteriormente, pero con un enfoque digital.
Los elementos distintivos de un modelo de negocio son:
- Canales de comunicación.
- Finanzas.
- Actividades.
- Responsables y participantes.
En resumen, es una visión estratégica que describe cómo una organización opera para generar ingresos y crear valor para sus clientes. Considéralo un plan detallado que muestra cómo utilizar los recursos, las habilidades y las competencias disponibles para lograr los objetivos corporativos. Ya sea en un entorno tradicional o digital, tener un modelo de negocio sólido y bien definido es fundamental para el éxito empresarial. ¡Sigue aprendiendo sobre gestión empresarial en VIU y mejora tu especialización con un MBA online!