Logística 4.0, el futuro tecnológico de la industria
Con el paso del tiempo, la industria en general está presenciando una revolución que ha sido denominada oficialmente como la cuarta revolución industrial o industria 4.0 para abreviar. De la mano de esta nueva generación de la industria, que apuesta por la tecnología, la informática, la inteligencia artificial, la robótica y la realidad virtual, llega también la introducción en el mercado de diversas corrientes paralelas.
Una de ellas es la logística 4.0, que se ocupa de mantener la estabilidad de esta era revolucionaria en el momento en el cual ese producto que ha sido creado de manera innovadora se pone en marcha para comenzar su proceso de transporte. Los expertos aseguran que no puede existir industria 4.0 sin que exista también logística 4.0, dado que ambos sistemas de la cadena de fabricación y comercialización se encuentran unidos de manera absoluta.
¿Qué retos afronta la logística 4.0?
Desde que se ha comenzado a fomentar el trabajo en la logística de nueva generación, se ha hecho especial hincapié en una serie de desafíos a los que los especialistas deben hacer frente. El objetivo de esto es garantizar que los pilares que forman la logística 4.0 actúan de manera conveniente para equipararse al trabajo de fabricación 4.0 y así mantener esa nueva estandarización. Estos retos a los que se planta cara se encuentran representados por:
- Tiempos de respuesta inmediatos
- Seguir la trazabilidad en todo el proceso
- Sacar provecho a la filosofía de la omnicanalidad
- Anticiparse a las necesidades
- Trabajar con modelos de logística totalmente inteligentes y a ser posible automatizados
No hay que pensar mucho para comprobar que lo que se busca en la logística 4.0 no es otra cosa que aprovecharse de esas técnicas automatizadas e inteligentes que proporcionan los sistemas informáticos actuales. Los tiempos de respuesta deben ser inmediatos y tener la suficiente capacidad para que un transporte actúe con urgencia en el momento en el que sea necesario sin sufrir parones ni ningún tipo de colapso. Para ello, es necesario beneficiarse de una flota que esté en constante preparación y que no deje huecos, adaptándose a los requisitos del momento gracias al uso de información procedente del análisis que ofrece el big data.
La trazabilidad de los procesos y repartos tiene que ser más transparente, estar más informatizada y analizada a fondo para que la propia empresa pueda aprender de los casos previos. Trabajar de una manera conectada, con la tecnología como herramienta principal y la información disponible en la nube, ayuda a introducir una mejor optimización de todos los procesos. Lo mismo se puede decir del anticipo a las necesidades, que se aprovecha de esta información, de casos recientes y de otros datos para actuar siempre por delante de cualquier tipo de trabajo de clientes habituales. Esto es clave para que la logística 4.0 despunte.
Un futuro cada vez más real
A largo plazo se puede pensar en que la logística 4.0, en realidad, solo acaba de comenzar a dar sus primeros pasos. Es una realidad imaginar que estamos en el inicio, raspando la superficie de lo que vendrá. Los expertos nos preparan y nos condicionan a que tengamos claro que en el futuro los almacenes estarán tan automatizados de forma estandarizada como ocurrirá también con el uso de camiones autónomos que no requerirán conductor. La combinación de vehículos autónomos con drones y un buen sistema de trazabilidad que hará que todo sea tan sencillo y rápido que no habrá que invertir recursos en procesos de supervisión que estarán basados en los datos de control que aporte el big data. Estos cambios no están tan lejanos como podamos imaginar y si nos fijamos ya podemos ver que los primeros pasos de la aplicación de la logística 4.0 están dando beneficios muy jugosos.
Otro aspecto que se remarca para que entendamos los beneficios de la revolución 4.0 en la logística lo apreciamos en el índice de entregas fallidas que se producen en la actualidad. Aunque en estos momentos todavía es algo que ocurre más de la cuenta, en fechas próximas se irá reduciendo la tasa de fracasos de una manera exponencial. El motivo de ello es que los propios sistemas automatizados comprobarán las cargas y el estado de las mismas durante los procesos de transporte para que cualquier tipo de problema sufrido no tenga que detectarse una vez llegado al destino. Estas tareas ayudarán a que la logística 4.0 confirme su gran mejora en los próximos años.