Influencia de las tecnologías de la información y de la comunicación (TIC) sobre la salud de los trabajadores
Numerosos estudios han obtenido evidencias sobre la influencia de la tecnología sobre la estructura social y sobre el diseño de la organización. El determinismo tecnológico sugiere que la tecnología es la causa que determina en gran parte las condiciones de la conducta organizacional. Burns y Stalker (1961) diferenciaron entre organizaciones mecánicas y organizaciones orgánicas en función de su capacidad para adaptarse a los cambios del entorno. Las organizaciones mecánicas presentan una estructura jerárquica rígida, con tareas fijas, alta formalización y alta centralización, por lo que su capacidad para adaptarse y asumir los cambios tecnológicos es baja, mientras que las organizaciones orgánicas presentan un alto grado de flexibilidad en las relaciones y en el diseño de las tareas, con baja formalización, descentralización en la toma de decisiones, altos niveles de comunicación informal, y una mayor capacidad para adaptarse a un entorno tecnológico
cambiante.
La tecnología se puede definir como el nivel de automatismo del equipo empleado para llevar a cabo las tareas. Se trata de un medio de trabajo cuyo fin es dotar al trabajador de los instrumentos necesarios para realizar las tareas y proporcionar bienestar y desarrollo al ser humano. Pero su influencia sobre la salud y el bienestar no siempre es positiva, pues, si bien automatizar los procesos de producción y servicios conlleva ventajas sobre la calidad de vida (v.g., reducción de horarios, mejora de la conciliación trabajo-familia, disminución del esfuerzo físico), también conlleva inconvenientes, como la disminución de la autonomía y de la capacidad de toma de decisiones.