Proyecto de investigación: problemas frecuentes y soluciones de gestión
Sin plazos establecidos o medidas de rendimiento para seguir el progreso, puede parecer que estás constantemente compitiendo contra el tiempo y los fondos para producir resultados.
Los problemas más comunes de un proyecto de investigación que se resuelven con una buena gestión
La investigación básica, a menudo llevada a cabo en un entorno de tipo académico (por ejemplo, una universidad, tiende a ser de naturaleza hipotética o exploratoria en lugar de ser producto de la industria. Por lo tanto, un proyecto de investigación básica puede no tener objetivos claramente definidos. Eso implica que la consecución de resultados inesperados puede alterar el curso de acción en un momento dado.
Sin plazos establecidos o medidas de rendimiento para seguir el progreso, puede parecer que se está constantemente compitiendo contra el tiempo y los fondos para producir resultados. Sin embargo, los métodos tradicionales de gestión de proyectos se pueden adaptar a los proyectos de investigación logrando que el trabajo de laboratorio sea más eficiente y productivo.
Esto se consigue, por ejemplo, mediante:
- La definición de entregables e hitos de proyectos basados en plazos.
- El establecimiento de medidas de desempeño para evaluar el progreso y los recursos necesarios para llegar allí.
- La designación de roles y responsabilidades.
Esta información se puede capturar en un plan de gestión de proyectos que dé lugar a una hoja de ruta para guiar la implementación exitosa de la iniciativa
No es algo extraño ya que los métodos tradicionales de gestión de proyectos se han estandarizado y empleado con éxito en varias industrias, de la fabricación a la construcción o el desarrollo de software. Los resultados saltan a la vista en especial cuando los proyectos tienen plazos definitivos y requisitos de productos.
Sin embargo, hay que observar la precaución de entender que, ya que un proyecto de investigación se centra en obtener conocimiento en lugar de impulsar la creación de nuevos productos, los procesos tradicionales de gestión de proyectos no necesitan seguirse estrictamente.
En la industria, el plan del proyecto se ajusta a medida que se produce el aprendizaje y se reorienta al producto que el proyecto se compromete a producir. Al realizar una investigación, el resultado final o producto no es la parte significativa del resultado.
La investigación se planifica y se lleva a cabo utilizando el método científico, se producen productos intermedios en forma de conjuntos de datos y documentos, y la hipótesis nula es cierta o no. Así, en función del progreso y el aprendizaje, el proyecto puede volver a planificarse y despegar en una dirección completamente nueva.
Esta gran replanificación rara vez sería aceptable en la industria, pero debe ser el proceso aceptado en todo proyecto de investigación.
Además, los niveles más altos de incertidumbre, aunque habituales, aceptados e incluso aceptados en el entorno científico, constituirían un riesgo inaceptable en la mayoría de los entornos empresariales. Por lo tanto, la flexibilidad es clave para evolucionar con el proyecto según sea necesario.
Teniendo esto en cuenta, cabe destacar que las técnicas de Project Management aplicadas a un proyecto de investigación son fuente de beneficios ya que, manteniendo intacta la creatividad, la gestión de proyectos puede ayudar a reducir el esfuerzo perdido, monitorizar el progreso y responder rápidamente a las desviaciones de los objetivos importantes. Se trata de factores pueden ayudar a los investigadores a trabajar de manera más inteligente con los recursos disponibles y demostrando un historial positivo de éxito del proyecto.