Dr. Rafael Pardo Gabaldón: consejos realistas para emprender con propósito
Consejos realistas para emprender. Dr. Rafael Pardo Gabaldón. VIU
Emprender se ha convertido en la meta de una gran parte de la población. Las cifras al respecto son muy claras: Según el informe GEM 2023, en España, tanto la tasa de actividad emprendedora total (TEA) como la tasa de actividad emprendedora temprana (TEAJoven), han aumentado de forma significativa este año respecto al anterior, creciendo un 6,5% y un 10,7% respectivamente. De cara al futuro, el informe señala que el porcentaje de los que piensan emprender en los próximos tres años es del 9,4%, un dato que confirma la tendencia al alza del sector.
Por ello, no es de extrañar que el sueño de construir un proyecto propio y, por qué no, incluso convertirse en un ‘unicornio’, sea la motivación que impulsa los esfuerzos de cada vez más personas. Sin embargo, el camino que va de la idea hasta su ejecución y, sobre todo, a su viabilidad y éxito, es uno lleno de complicaciones, obstáculos y desvíos. Por ello, para contribuir a una buena planificación que nos ayude a crear un proyecto de emprendimiento sólido, le pedimos a nuestro experto, el Dr. Rafael Pardo Gabaldón, doctor Internacional en Derecho del Trabajo, especializado en emprendimiento y docente de la Facultad de Ciencias Sociales y Jurídicas de VIU.
El Dr. Pardo Gabaldón señala que, si bien el entusiasmo y la inspiración son importantes para recorrer el camino del emprendedor, ser realista y hasta cierto punto pragmático lo es aún más. Por ello, ha compartido con nosotros una serie de consejos muy centrados en este enfoque, con el fin de ayudar a todas las personas que quieren emprender, pero no tienen del todo claro en qué ni cómo.
1. No existen mejores emprendimientos que otros: Existen sectores que están en auge, como el de la energía (energías renovables, especialmente), la tecnología (ciberseguridad), la logística o la atención a personas dependientes. No obstante, las oportunidades de emprendimiento están en todo tipo de áreas y actividades.
2. No hay emprendimientos más exitosos que otros: aunque se hable de que algunos emprendimientos están más destinados al éxito que otros, la verdad es que no hay regla matemática que afirme esto con tal exactitud. La clave dentro de todo es que el proyecto empresarial, sea cual sea, tenga una verdadera demanda en el mercado, genere valor añadido y cuente con los recursos económicos y humanos necesarios para implementarlo y desarrollarlo.
3. Cambia tu trabajo por tu emprendimiento con sensatez: el entusiasmo por emprender puede dibujar la ilusión de dedicarse rápidamente a un proyecto propio a tiempo completo, pero es importante considerar dos caminos. Si estás a gusto en tu trabajo y deseas emprender para mejorar o lograr un sueño, lo más sensato es mantener tu puesto mientras en tus ratos libres vas trabajando en la planificación de su proyecto.
Pero si una persona no está a gusto en su trabajo, lo mejor es no prolongar la agonía y lanzarse cuanto antes en intentar su sueño, pero es muy importante hacerlo si se lo puede permitir económicamente y si se ha realizado una planificación previa suficientemente sólida.
4. La frustración es real e inevitable: todo proyecto empresarial es una carrera de fondo, llena de altibajos; hay que estar mentalizado de antemano. En este sentido, la constancia, la disciplina y, sobre todo, tener claros el camino y la meta a alcanzar, es fundamental para sortear cualquier piedra que vaya apareciendo en el trayecto. Para cuando lleguen las épocas de crisis, será importante rodearse de los mejores y estar bien asesorado.
5. Reconocer cuándo tu negocio es solvente y estable: Hay tres señales iniciales para saber si tu negocio es rentable: tener un buen volúmen de clientes, que estos estén realmente satisfechos con tu producto o servicio y, posteriormente, haber llegado a una buena cuenta de resultados.
Además, a modo de conclusión, el Dr. Rafael Pardo, indica que el proyecto que se decida construir “Debe contar con los recursos necesarios para su puesta en marcha, y a partir de ahí, resulta imprescindible la elaboración de un buen plan de empresa asesorado por los mejores. Dentro del plan se deben desarrollar aspectos fundamentales, como la ubicación, los recursos económicos y humanos necesarios, y sobre todo y fundamentalmente un buen plan de marketing y un estudio de mercado, que determine si verdaderamente nuestro producto o servicio cuenta con demanda en el mercado”.