Atención centrada en la persona: qué es y cómo comenzar a aplicarla.

Si entramos en una residencia tradicional la imagen que recibiremos generalmente será la siguiente: pasillos inmaculados y habitualmente vacíos, salón con una televisión a la que miran decenas de personas durante horas, habitaciones indistinguibles unas de otras, comedor en que varía la consistencia de la comida, pero no su contenido.

Así pudiéramos seguir enumerando un sinfín de escenas que tienen algo en común: la homogenización del ser humano, que por naturaleza es diverso. Una residencia que haya asumido el modelo de atención centrada en la persona podrás identificarla inmediatamente: es diversa, algo bulliciosa.

Las habitaciones son perfectamente distinguibles por su personalización y los espacios son más pequeños, acogedores; no es una casa en el sentido tradicional, pero es el mejor esfuerzo para que ese espacio se sienta como el hogar ¿En qué consiste la atención centrada en la persona? ¿Cómo se puede aplicar? En este artículo te introduciremos en esta metodología.

Qué es la atención centrada en la persona

En primer lugar, es una forma de entender la prestación de cuidados a las personas que necesitan de ellos, en especial los adultos mayores, que pone al ser humano y sus necesidades como centro fundamental para el desarrollo de planes de atención. Pero esa forma de entender los cuidados también implica una forma de actuar y ofrecer servicios a las personas en situación de dependencia.

Desde la metodología de atención centrada en la persona se persigue:

• Favorecer la independencia funcional de la persona el mayor tiempo posible.
• Crear las condiciones para que la persona sea capaz de dirigir su vida en función de sus deseos, creencias, gustos e intereses.

El enfoque de atención centrada en la persona puede aplicarse en todos los ámbitos, ya sea en el hogar o el residencial, pero es en este último donde ha alcanzado más auge precisamente porque implica un cambio notable en las formas de hacer y entender la prestación de cuidados.

Desde la atención centrada en la persona no vale que el equipo multidisciplinar se reúna y elabore un plan de atención en función de lo que ellos creen que es mejor para el usuario. Desde este enfoque la elaboración de planes de atención parte de preguntar a la persona qué quiere y cómo lo quiere. A partir de ahí es que los equipos diseñan estrategias para facilitar al usuario alcanzar sus metas.

¿Cómo aplicar el modelo de atención centrada en la persona? Algunos consejos prácticos

Muchos dirán que lo anterior suena muy bien, pero que llevarlo a la práctica es más complicado. A ellos les decimos que muchos centros ya funcionan bajo los principios y metodologías de la atención centrada en la persona. Aquí te damos algunos consejos para llevarla a la práctica:

• Formar y sensibilizar al personal en el modelo de atención centrada en la persona. Esta metodología implica sobre todo un cambio de mentalidad, de enfoque.
• Comenzar a introducir los cambios con trabajadores que se hayan ofrecido de voluntarios, así evitarás las resistencias iniciales.
• Evaluar la situación actual y definir hasta dónde quieren llegar, después ¿Qué hacer para llegar hasta allí?
• Asignar un profesional de referencia, que será el encargado de facilitar que la persona necesitada de cuidados logre su mayor autonomía física y moral.
• Elaborar una historia de vida de la persona, preferiblemente por parte del profesional de referencia.
• Elaborar fichas sobre los intereses, preferencias y deseos de la persona. Debe contener detalles sobre en qué le gustaría invertir su tiempo, a qué hora desea levantarse, en qué actividades sociales desea participar, etc.
• Estimular que la familia y el usuario traigan objetos que tengan un significado personal importante para el mayor. Que decoren la habitación según los gustos.
• Cuando existan limitaciones cognitivas que impidan a la persona expresar sus gustos, debemos apoyarnos en el conocimiento de los familiares.

Aplicar los principios de la atención centrada en la persona es apostar por el ser humano y su bienestar, es apostar por nuestro propio bienestar cuando necesitemos de cuidados. Construyamos desde ya la forma en que queremos ser atendidos.