Dietética y salud: los nuevos alimentos
Cada vez somos más conscientes de la importancia de cuidar nuestra dieta para proteger nuestra salud, por eso actualmente se apuesta por lo natural y a la vez se han ido creando nuevos alimentos que han cambiado la forma en la que compramos y comemos. Vamos a ver cuáles son esos nuevos alimentos y cómo inciden en dietética y salud.
¿Qué es la dietética?
Se puede hablar de dietética en tres sentidos, que son los siguientes:
- Como el conjunto de sustancias alimentarias que forman parte de la nutrición de un organismo vivo.
- Como el conjunto de alimentos o bebidas denominados light puesto que contienen una cantidad más baja de grasas o azúcares.
- Y, finalmente, como la disciplina que estudia la relación entre la salud y la alimentación.
La dietética como disciplina tiene en cuenta la función de nutrición del ser humano y aspectos como la geografía, el clima, la cultura y la economía, además de los gustos de las personas, para establecer la dieta más adecuada según el caso concreto de cada persona. El dietista o nutricionista estudia cada caso y tiene en cuenta aspectos como aspectos de la salud como la diabetes o colesterol, por ejemplo, la actividad física que realiza una persona, el embarazo, la recuperación tras una operación quirúrgica y otras muchas circunstancias.
Descarga nuestra guía gratuita: 6 tendencias en nutrición que marcarán los próximos años
Nuevos alimentos y su influencia en dietética y salud
La preocupación por nuestra salud ha hecho surgir a los llamados nuevos alimentos, llamados también alimentos funcionales puesto que además de nutrir aportan sustancias que mejoran las salud. Los alimentos funcionales pueden ser de diferente tipo, por ejemplo:
- Alimentos a los que se ha añadido o eliminado un componente.
- Alimentos en los que se ha modificado un componente.
- Alimentos que combinan varias características de las descritas anteriormente.
La dietética ha cambiado radicalmente con este tipo de alimentos de forma que dietética y salud actualmente tienen objetivos conjuntos. Entre dichos objetivos podemos destacar los siguientes:
Crecimiento y desarrollo de los niños
Una alimentación sana y correcta puede beneficiar a los niños durante el embarazo, la lactancia y el desarrollo posterior. En este sentido, diversos autores han sostenido los beneficios que pueden aportar elementos como los oligosacáridos, gangliósidos, glicoproteínas de alto peso molecular o prebióticos.
Mejora del proceso metabólico
Los alimentos buscan mejorar el proceso metabólico a través de la selección de alimentos que produzcan picos de glicemia moderados y desarrollando nuevos ingredientes como los carbohidratos hidrogenados.
Defensa ante la oxidación
Los procesos de oxidación que tiene nuestro cuerpo aceleran el envejecimiento y la aparición de diversas enfermedades. Por ese motivo, los alimentos incorporan cada vez más elementos antioxidantes como las vitaminas E, C y carotenoides.
Mejora del aparato circulatorio
Existen determinados tipos de alimentos funcionales que pueden influir sobre algunos elementos (el colesterol, por ejemplo) que predisponen a enfermedades cardiovasculares como la hipertensión. En este sentido destaca el papel de los ácidos grasos, la fibra y los antioxidantes.
Mejora de la digestión
Elementos como los prebióticos, los probióticos y los simbióticos influyen en la flora intestinal favoreciendo el equilibrio y la digestión.
Efectos en el rendimiento mental
Desde hace tiempo se conoce la relación entre determinados alimentos como la cafeína, el chocolate y los carbohidratos y la aptitud mental de las personas. Por otro lado, los estudios se orientan cada vez más a la búsqueda de alimentos que favorecen la sensación de saciedad y, por lo tanto, contribuyen a evitar la obesidad.